ESQUINA FINANCIERA
La suma de la colecta durante las Misas del domingo pasado fue $7,390. Recibimos $5,581 a través de WeShare para un total de $12,971. Gracias por dar tan generosamente a nuestra colección regular.
Queridos Feligreses y Amigos;
El 13 de octubre de 2019, el Vaticano canonizará al Beato Cardenal John Henry Newman. Newman fue un teólogo, poeta, sacerdote católico y cardenal del siglo XIX. Originalmente un sacerdote anglicano, se convirtió al catolicismo en 1845 y sus escritos se consideran entre algunos de los escritos de la Iglesia más importantes de los últimos siglos. Para celebrar este gran evento, me gustaría compartir con ustedes una hermosa reflexión que Newman escribió:
“Dios me ha creado para hacerle un servicio definitivo. Me ha encomendado un trabajo que no se ha comprometido a otro. Tengo mi misión. Puede que nunca lo sepa en esta vida, pero me lo dirán en la próxima. Soy un eslabón en una cadena, un vínculo de conexión entre personas. No me ha creado para nada. Haré el bien; Haré su obra. Seré un ángel de paz, un predicador de la verdad en mi propio lugar, aunque no lo intente si lo hago, pero guardo Sus mandamientos. Por lo tanto, confiaré en Él, sea lo que sea que sea, nunca me dejarán de lado. Si estoy enfermo, mi enfermedad puede servirle, en la perplejidad, mi perplejidad puede servirle. Si estoy triste, mi pena puede servirle. No hace nada en vano. Él sabe de qué se trata. Puede llevarse a mis amigos. Puede arrojarme entre extraños. Él puede hacerme sentir desolado, hacer que mi espíritu se hunda, esconder mi futuro de mí. Aún así, Él sabe de qué se trata ”.
Cada uno de nosotros es una persona única, individualmente conocida y amada y llamada por Dios por su nombre. Cada uno de nosotros tiene un llamado definitivo en la vida. Cada uno de nosotros importa. Cada uno de nosotros es capaz de la verdadera grandeza a los ojos de Dios. Para el cardenal Newman, como para tantos santos a través de los siglos, la verdadera grandeza es una cuestión de fe infantil y confianza en Dios y fidelidad en servir a Dios de una manera principalmente tranquila y simple en nuestra vida diaria, sean cuales sean nuestras circunstancias en la vida.
Este domingo seré instalado como Pastor de esta hermosa parroquia. Como pueden imaginar la tarea y la responsabilidad ante mí, es bastante abrumadora. Humilde al ser llamado a pastorear un rebaño tan vibrante, lo hago con su apoyo y sus oraciones. Lo hago confiado orientado por Dios y en el amor de Dios.
Como siempre pedimos rezar por la paz.
Padre David Nolan
AUMÉNTANOS LA FE
De manera abrupta, los discípulos le hacen a Jesús una petición vital: «Auméntanos la fe». En otra ocasión le habían pedido: «Enséñanos a orar». A medida que Jesús les descubre el proyecto de Dios y la tarea que les quiere encomendar, los discípulos sienten que no les basta la fe que viven desde niños para responder a su llamada. Necesitan una fe más robusta y vigorosa.
Han pasado más de veinte siglos. A lo largo de la historia, los seguidores de Jesús han vivido años de fidelidad al Evangelio y horas oscuras de deslealtad. Tiempos de fe recia y también de crisis e incertidumbre. ¿No necesitamos pedir de nuevo al Señor que aumente nuestra fe?
Señor, auméntanos la fe
Enséñanos que la fe no consiste en creer algo sino en creer en ti, Hijo encarnado de Dios, para abrirnos a tu Espíritu, dejarnos alcanzar por tu Palabra, aprender a vivir con tu estilo de vida y seguir de cerca tus pasos. Solo tú eres quien «inicia y consuma nuestra fe».
Auméntanos la fe
Danos una fe centrada en lo esencial, purificada de adherencias y añadidos postizos, que nos alejan del núcleo de tu Evangelio. Enséñanos a vivir en estos tiempos una fe, no fundada en apoyos externos, sino en tu presencia viva en nuestros corazones y en nuestras comunidades creyentes.
Auméntanos la fe
Haznos vivir una relación más vital contigo, sabiendo que tú, nuestro Maestro y Señor, eres lo primero, lo mejor, lo más valioso y atractivo que tenemos en la Iglesia. Danos una fe contagiosa que nos oriente hacia una fase nueva de cristianismo, más fiel a tu Espíritu y tu trayectoria.
Auméntanos la fe
Haznos vivir identificados con tu proyecto del reino de Dios, colaborando con realismo y convicción en hacer la vida más humana, como quiere el Padre. Ayúdanos a vivir humildemente nuestra fe con pasión por Dios y compasión por el ser humano.
Auméntanos la fe
Enséñanos a vivir convirtiéndonos a una vida más evangélica, sin resignarnos a un cristianismo rebajado donde la sal se va volviendo sosa y donde la Iglesia va perdiendo extrañamente su cualidad de fermento. Despierta entre nosotros la fe de los testigos y los profetas.
Auméntanos la fe
No nos dejes caer en un cristianismo sin cruz. Enséñanos a descubrir que la fe no consiste en creer en el Dios que nos conviene sino en aquel que fortalece nuestra responsabilidad y desarrolla nuestra capacidad de amar. Enséñanos a seguirte tomando nuestra cruz cada día.
Auméntanos la fe
Que te experimentemos resucitado en medio de nosotros renovando nuestras vidas y alentando nuestras comunidades.
Fr D’Angelo Jiménez.
Bibliografía A. Pagola.